Es obvio que el sindicalismo está en el punto de mira de los poderes económicos y la derecha política, como podemos comprobar en los últimos tiempos en Europa.

El mundo sindical supone la base de la izquierda y un freno a las políticas que buscan erosionar los pilares de Estado de Bienestar.

Las libertades sindicales y su acción como contrapeso al descomunal poder empresarial suponen unos pilares fundamentales de un sistema democrático. La ausencia de sindicatos significaría el retroceso total en derechos y libertades sociales y laborales, como podemos ver en gran parte de lugares del planeta.

SOLIDARI forma parte del extenso mundo sindical que trabaja en la defensa de los derechos laborales y sociales.

Un mundo sindical necesario, pero en el que son habituales muchas formas de hacer sindicalismo poco presentables (poca participación de base, falta de transparencia, dependencia económica... etc).

Creemos que las acciones y las participaciones colectivas son las claves del sindicalismo. Por eso tiene mucho valor la libre representación sindical. La forma en la que las personas de un centro de trabajo eligen a sus representantes sindicales democráticamente. Un derecho que se puede ejercitar en centros de trabajo a partir de 6 personas de plantilla; y que dota de una cierta protección a las personas representantes sindicales.

Por eso desde SOLIDARI queremos animar a esa participación, tanto en la afiliación a los sindicatos, como en las elecciones sindicales.

Si coincides con nuestros puntos de vista tienes la puerta abierta para afiliarte y presentarte a las elecciones sindicales con nuestro sindicato, donde lo que importa son las personas.