1º de Mayo tras las Marchas de la Dignidad
“La pobreza no es un accidente. Como la esclavitud y el apartheid, es una
creación humana y puede eliminarse con las acciones de los seres humanos”.
Nelson Mandela
Después de haber tomado parte en las marchas de la dignidad, compartiendo con más de 200 asociaciones y sindicalistas de izquierda un espacio de pelea, nos parece importante seguir saliendo a la calle a exigir que nos oigan, a exigir de la clase gobernante que paren las políticas de austeridad y recortes sociales, a exigir una democratización del sistema político y que se repongan los derechos eliminados con las últimas reformas laborales y de pensiones. Que se destine el dinero a generar empleo y hacer realidad el derecho a “pan, trabajo y techo”.
Queremos animarte a acudir a la Manifestación de este 1º de Mayo como autoafirmación de la dignidad popular en los valores de justicia social y de participación democrática, peleando, para que sientan la indignación y el clamor de tanta gente que estamos sufriendo situaciones de emergencia social.
Estamos sufriendo de 2008 a aquí una de las embestidas más feroces de política neoliberal, con grandes costes en derechos sociales, sindicales y político-democráticos, y está suponiendo un proceso de adelgazamiento democrático muy importante en los países de la Unión Europea. Hacen falta otras políticas de justicia social y una mejor distribución de la riqueza.
Tener un nivel de paro por encima del 25%, que la gente joven esté yéndose al extranjero a buscarse la vida, que 4 de cada 10 personas en paro no cobre ningún tipo de subsidio, que se haya “salvado” a los bancos en lugar de a las personas con el dinero público, que la reforma del sistema de pensiones merme la jubilación de las personas mayores, que muchos ERES dejen personas paradas mayores de 55 años sin futuro, que se esté enviando a muchas mujeres de vuelta al hogar para hacerse cargo del cuidado de personas mayores después de cercenar la Ley de Dependencia, que muchas personas inmigrantes sin colchón social dónde cobijarse se vean obligadas a retornar o buscar otro país, que el Estado de Bienestar esté en riesgo de desguace, que “adelgacen” la Administración Pública poniendo en peligro derechos básicos para la población y creando el mayor nivel de desigualdad social de la Unión Europea, genera una fractura interna muy fuerte, los ricos son cada día más ricos, hay y habrá muchas más personas pobres, y de ellas cantidad rozan o viven en la miseria. Nunca tan pocos han hecho tanto daño a tantos.
No podemos seguir consintiendo estar en manos de unos políticos, banqueros y lobby empresariales que se entregan al interés de los poderosos y grandes corporaciones, a la globalización de las políticas neoliberales que cuestionan los estados de bienestar nacionales, a la perdida de la autonomía para poder aplicar políticas como país priorizando a las familias en lugar de premiar con más de 40.000 millones a los sectores financieros (millones que nunca devolverán para el interés común). Son incapaces de sacarnos de éste agujero, pero además, no quieren. Primero PSOE y después PP han cumplido todas las exigencias de la Unión Europea, por más catastróficas que fueran para las gentes trabajadoras. Así el divorcio tan grande entre ciudadanía y representantes políticos mayoritarios.
Dicen que se ve ya el final del túnel, pero mucho nos tememos que TODAS las políticas y recortes neoliberales que han “implantado” se quedan. Hace falta ser muy deshonestos para defender la necesidad de “estas” reformas como necesarias para salir de la crisis. Hoy mismo han cantado los beneficios de la Banca en el año 2013. Más de 7000 millones de euros.
Mientras, el empobrecimiento de amplias capas de la población, la falta de alimentos y desnutrición infantil que nunca hubiéramos pensado y que hoy se atiende con desayunos y meriendas en las escuelas, la pobreza energética con domicilios a falta de luz y algunos de agua, los desahucios de domicilios por no poder pagar las cuotas de hipoteca o el alquiler, gente que vive en la calle y cantidad de viviendas cerradas en manos de los bancos especuladores, los bancos de alimentos como recurso para poder comer muchas familias… Y nadie parece querer paliar la muy distinta incidencia y repercusión de ésta crisis en las distintas clases sociales. El reparto de costes y sacrificios ha sido tremendamente injusto, lo que está generando una profunda insatisfacción de mucha gente contra este sistema político que se cuida de los intereses de los que más tienen, que son además los desencadenantes de la crisis y del estallido de la burbuja inmobiliaria. Se necesita una reforma fiscal progresiva, una distribución mejor de la riqueza, mayor inversión pública en el empleo y el impulso de un modelo productivo basado en el desarrollo sostenible y en la cualificación.
Las Marchas de la Dignidad han sido importantes. Han tenido la virtud de unir muchas voluntades y colectivos sindicales y sociales diversos para poner en común las denuncias y demandas de muchas personas. Han sido una demostración del SI SE PUEDE frente al desaliento de “no hay alternativas”. Con la unión y la movilización social podemos cambiar las cosas. Únete y ven a la Manifestación de este 1º de Mayo.
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