Por alusiones en “bienvenidos a Koxka, con la verdad”  (*)

Nos congratula que desde CCOO se reconozca el buen trabajo de nuestros servicios jurídicos, que han obtenido una sentencia del Tribunal Supremo que anula los despidos de 10 trabajadores de Koxka. Aunque su “enhorabuena a tanto tesón y trabajo jurídico que puede culminar con un final feliz, partiendo de hechos tan sesgados desde nuestro punto de vista”, denota un resquemor evidente.

La Sentencia del Supremo anula la inclusión de los 10 trabajadores en la lista de despidos, por vulnerar su derecho a no ser discriminados por razón de su afiliación, actividad u opinión sindical.

El Tribunal llega a la conclusión de que hubo discriminación antisindical partiendo del siguiente hecho: de un total de 13 miembros de nuestra candidatura (**), que podían ser despedidos, fueron despedidos 12, lo que supone un 92,3%, en comparación con los porcentajes del 5 y 8,7% de despedidos, integrantes de las candidaturas de los sindicatos UGT y CCOO, añadiendo que no se siguieron criterios objetivos y generales para decidir quiénes iban a ser despedidos, o cuando menos no se explicaron ni probaron. ¿Son ésos los hechos sesgados a los que se refiere la señora Zapata?

También dice la sentencia que la lista formaba parte del Acuerdo firmado por la empresa y por los representantes de UGT y CCOO (la autoridad laboral se limitó a homologarlo), lo que significa que los firmantes del mismo son corresponsables de los despidos discriminatorios, de manera que unos ponen la firma y otros ponemos los despedidos. ¿Aparte de la semana sabática  posterior a la firma del ERE obtuvieron alguna recompensa los firmantes?

En el ERE de Koxka, exceptuando algún trabajador de oficinas, la mayoría de los trabajadores apoyaron las movilizaciones, que tenían un claro objetivo, tantas veces repetido en las asambleas por todos los sindicatos, ni un solo despido. Propusimos alternativas: prejubilaciones, bajas voluntarias, reparto del trabajo, suspensión de la prima de producción y un ERE temporal.

Finalmente, los firmantes del Acuerdo aceptaron los despidos forzosos, afirmando que las condiciones que consiguieron eran excelentes, pero ningún representante de CCOO o de UGT se sumó voluntariamente a la lista de despedidos. ¿Si las condiciones eran tan buenas, por qué no lo hicieron?

Desde Solidari hemos insistido durante estos tres años para  que las personas despedidas volvieran a ser contratadas pero siempre nos hemos topado con  la oposición de CCOO y UGT a pesar de que ha habido nuevas contrataciones. ¿Serán afiliados a alguno de estos sindicatos?

El Tribunal Supremo nos ha dado la razón. Ahora toca dar explicaciones a los representantes que firmaron el Acuerdo y a los  asesores que intervinieron en las negociaciones, Lorenzo Ríos (UGT) y José Ramón Fernández (CCOO), aunque mucho nos tememos que después de protagonizar este escándalo sindical, no den la cara ni asuman su responsabilidad.

27-04-2012. Isidro Martínez Anaut 52.444.430-Z, Miguel Ángel Leiva Beato 19.139.479-C y Roberto Jiménez Ruiz 44.619.287-T de la Sección sindical de SOLIDARI.

(*) Respuesta al artículo publicado en Diario de Noticias (Foro sindical de 25 de abril de 2012) firmado por Ana Zapata, Secretaria de Acción Sindical de la Federación de Industria de de CCOO de Navarra.

(**)En aquél entonces de ESK. Tras la separación y la constitución de SOLIDARI (en junio de 2010) sólo uno de los miembros optó por quedarse en ESK.